Puente a ninguna parte
La Generalitat deja muerto el paso elevado construido sobre el AVE para unir Gaspar Aguilar con la V-30
JOSÉ PARRILLA VALENCIA La entrada del tren de alta velocidad en Valencia va dejando por el camino infraestructuras paralelas que precisan del acabado de otras administraciones y que, en algunos casos se están quedando aisladas y sin uso. Ese es el caso del puente que se ha construido sobre el AVE a la altura del tanatorio municipal, construido por Adif a petición de la Conselleria de Infraestructuras y ahora abandonado y sin uso, según ha denunciado la Asociación de Vecinos de San Marcelino.
Tradicionalmente, el camino entre el Cementerio General de Valencia y el tanatorio municipal se hace recorriendo la carretera que rodea el camposanto por su tapia sur. La construcción del AVE, sin embargo, partió esa carretera y obligó a construir un puente sobre las vías para llegar al tanatorio. Y así se hizo. Es más, la Conselleria de Infraestructuras de la Generalitat Valenciana pidió a Adif, responsable de las obras del AVE, que aprovechara el momento para hacer un puente más grande, con dos carriles por sentido, y así poder dar salida al tráfico de Gaspar Aguilar, la calle que va desde el cementerio, hacia la V-30 y el corredor comarcal CV-400, que viene desde el otro lado del cauce por Sociópolis-La Torre.
Adif aceptó la propuesta y desdobló el puente, pero ahora le toca a la Conselleria de Infraestructura hacer esas conexiones, es decir, seguir las carretera hasta Gaspar Aguilar por un lado, y hasta la CV-400 y la V-30 por otro. Y no se han hecho. En la actualidad el puente únicamente da servicio al tanatorio, con un carril de ida y otro de vuelta. Nada más.
Importante para el barrio
Según Vicent Soler, presidente de la Asociación de Vecinos de San Marcelino, estas conexiones son vitales para el barrio, pues dan salida al tráfico de la zona y aligera la circulación de la calle San Vicente, que es la vía a la que se tienen que desplazar todos los coches para salir hacia la circunvalación o el corredor comarcal, que enlaza con poblaciones como la Torre, Benetusser, Massanassa, Catarroja y Albal.
Descongestionaría, así mismo, el propio barrio de San Marcelino, que en ocasiones se ve colapsado por los coches que tratan de esquivar el atasco de San Vicente.
Soler asegura que este tema ha sido planteado a la conselleria sin que hasta el momento se tenga respuesta. Cree, finalmente, que la paralización de la obra no puede justificarse con la próxima construcción de una vía alternativa a la Pista de Silla que entraría en la ciudad a esta altura. Soler cree que se trata una obra a largo plazo a la que no puede esperar el barrio.
Acceso al tanatorio desde San Marcelino
Y si una infraestructura se queda en el aire, otra avanza entre elogios vecinales. Se trata del acceso directo desde San Marcelino y Camí Reial al tanatorio municipal de la ciudad. A petición de los vecinos, Adif construye estos días -la obra ya está muy avanzada- una carretera, con vía paralela para peatones o bicicletas, que cruza por encima de las vías del AVE justo donde empieza el soterramiento de las mismas y enlaza directamente con estas instalaciones. Son apenas trescientos metros de trayecto. En la actualidad, los vecinos del barrio tienen que salir a la rotonda que hay junto al cementerio general, subir por el puente sobre el AVE y completar la "U" hasta el tanatorio, aproximadamente un kilómetro de trayecto.
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